La igualdad, un "claro sentido del propósito" en las empresas

Apostar por las mujeres o acercar los valores de la empresa a los de la sociedad son algunas de las estrategias de responsabilidad social corporativa que las compañías tienen que seguir para adaptarse a un momento marcado por "la competitividad, la transformación digital, el cambio climático y la igualdad".

Esta ha sido una de las conclusiones alcanzadas este jueves durante la inauguración del ciclo de conferencias "Un claro sentido del propósito" , organizadas por el Banco Santander para visibilizar el talento femenino en el mundo empresarial. La primera jornada, protagonizada en su totalidad por mujeres, ha estado dedicada a la "Responsabilidad Social y la gestión del dato en las empresas".

"Las mujeres tenemos un claro sentido del propósito, sabemos donde estamos, a donde vamos, hacia donde queremos llegar y para qué", ha desatacado durante la apertura del ciclo la vicepresidenta de Santander España, Isabel Tocino, quien ha asegurado que "lo intangible" -los valores, la motivación, el capital humano o la cultura- y las "relaciones de confianza" cada vez adquieren más relevancia en las empresas.

"La mujer siempre ha vivido en función del padre, del marido o de los hijos, ha llegado la hora de vivir en función de nosotras mismas", ha afirmado Tocino

Para Tocino, además, las mujeres son las que mejor gestionan estos intangibles en las compañías y por eso, ha argumentado, ha llegado el momento de que se hagan valer por lo que pueden aportar a la empresa y la sociedad: "La mujer siempre ha vivido en función del padre, del marido o de los hijos, ha llegado la hora de vivir en función de nosotras mismas".

Igualdad e innovación en las empresas

Durante la jornada se ha celebrado una mesa redonda sobre "El impacto ESG en la empresa y los retos de la innovación", que ha reunido a Begoña Gómez, experta en el tercer sector e impacto social; Isabel Martínez Conesa, integrante del Observatorio RSC de la Universidad de Murcia; Rosa Sanz de Naturgy, COO Infraestructuras EMEA y Patricia Crespo, directora de Efeminista en la Agencia EFE.

Igualdad e innovación, no solo tecnológica sino en la manera de mirar las cosas, han sido los dos elementos clave citados por las participantes para que las empresas se adapten al entorno cambiante y tengan un impacto social que genere beneficios a la sociedad.

No dejar a nadie atrás

Durante el coloquio, moderado por la Presidenta de 50&50 GL, Gloria Lomana, se ha recordado, además, la responsabilidad de las empresas para implantar los Objetivos de Desarrollo Sostenible "sin dejarse a nadie atrás" y empoderando a la plantilla y, en concreto, a las mujeres.

"La empresa es un factor clave para que las mujeres no sean las grandes perdedoras de la revolución tecnológica en la que estamos ya inmersos”, ha subrayado Crespo, para quien la igualdad es una cuestión de "justicia, de inteligencia y de rentabilidad", porque los estudios demuestran que cuando ellas ocupan puestos directivos las empresas mejoran su cuenta de resultados.

Como ejemplo de buenas practicas, Begoña Gomez ha destacado el papel de las mujeres emprendedoras rurales, quienes son "un modelo de impacto social imparable y que España necesita" ante la urgencia de poner el foco en las personas y el planeta.

La igualdad no puede ser un escaparate

En este sentido, todas ellas han coincidido en que la igualdad no puede "ser un escaparate", sino que tiene que estar presente en toda la estructura de la organización y las mujeres tienen que estar representadas en los puestos de toma de decisión de las empresas.

"Tenemos que ser concretas cuando analizamos los números de dónde están las mujeres, estar en un consejo administración está bien, pero las mujeres queremos estar en los centros de decisión", ha reivindicado la COO EMEA infraestructura de Naturgy.

Según el “Estudio sobre la presencia de la mujer en los órganos de dirección de las empresas del IBEX 35” de Atrevia y EJE&CON, presentado este mes noviembre, de las 473 personas que forman parte de los Comités de Dirección de las compañías del Ibex 35 tan solo 74 son mujeres, lo que supone una proporción del 15,6%.