"Papicha, sueños de libertad", rebeldía frente a la represión en Argelia

"Papicha, sueños de libertad", el debut autobiográfico de la cineasta franco-argelina Mounia Meddour donde la rebeldía de las jóvenes choca contra la represión de una Argelia sumida en la guerra civil y una sociedad que las juzga por el hecho de ser mujeres, llega a los cines españoles este viernes 7 de agosto.

La elección del título no es casual, "papicha" significa mujer jovial, joven y alegre en árabe. Pero en la Argelia que retrata el film no todas pueden ser así: la religión, la política, la intolerancia y los se creen con derecho a cercenar a quienes no se ajustan a las "normas", en este caso, los integristas, acaban literalmente con sus ilusiones, y a veces, con sus vidas.

Película autobiográfica

La cineasta Mounia Meddour es una de esas mujeres que, tras ocho años preparando la película, sí logró cumplir su sueño y contar esta realidad que vivió en carne propia y que siguen sufriendo tantas jóvenes.

Y así tituló su primera película, "Papicha, sueños de libertad", una narración que encoge el alma y que antes de aterrizar en España, ha pasado por el Festival de Cannes 2019 y ha cosechado galardones como el Premio César a la Mejor Ópera Prima y el Premio César a la Mejor Actriz Revelación para Lyna Khoudri, la interprete protagonista.

"Es una historia en parte basada en mis propias vivencias. Nací en Rusia, de padre argelino y madre rusa; nos trasladamos a Argelia cuando yo tenía un año, donde viví hasta los 18, entonces nos fuimos a Francia, obligados por las circunstancias", explica la directora, en declaraciones a Efe.

Rebeldía frente a la opresión

Las "circunstancias" eran una Guerra civil, constantes ataques yihadistas y 150.000 muertos en la conocida como "década negra".

Por este motivo el film se ambienta en 1997, cuando los yihadistas desean convertir Argel en un estado islámico y arcaico donde las mujeres no cuentan. Pero algunas se resisten a entregar al fanatismo el control de sus cuerpos, su forma de vestir y su modo de ocupar el espacio público.

Es el caso de la estudiante Nedjma, una apasionada de la moda, que ve un vestido primoroso en cada trozo de tela, así sea un haik, la prenda femenina más tradicional de Argelia, que ella quiere convertir en la base de un desfile.

Le costó ocho años preparar la película. "No fue fácil -admite-, fue muy duro volver a escarbar en los recuerdos de esos años, en los 150.000 muertos que causó la guerra, en la violencia, la opresión".

"Pero una vez superado todo esto, me esforcé en ser lo más fiel posible a mis recuerdos, en encontrar los decorados adecuados, los entornos, el ambiente, los colores, la luz. Quería plasmar la rebeldía de esas chicas, unas mujeres que quizá no tuvieran ideas políticas, pero que luchaban por la libertad actuando, haciendo algo concreto. Que no se rendían a pesar de todo", concluye, apasionada.

Fotografía facilitada por Bteam Pictures de la película "Papicha, sueñosde libertad". EFE

Un rodaje lleno de obstáculos

Rodar en Argelia no fue fácil, cuenta, ya que el tema no estaba "bien visto" ni en Argelia ni en Francia, a pesar de los años que han pasado, porque "muchas heridas siguen abiertas".

Otro problema fue encontrar financiación; de hecho, se tuvieron que juntar diez productores, ella incluida, una cineasta que hasta ahora sólo había hecho documentales.

Se sumó como impedimento su decisión de rodar en 'algérois' (argelino), la mezcla de árabe y francés que se habla en las ciudades de Argel, ya que ni el Ministerio de Cultura francés ni el argelino estaban dispuestos a darle fondos. "Al final conseguimos fondos argelinos, pero costó mucho".

Con los 40 ya cumplidos, Meddour sigue hablando de sus raíces: prepara su segundo largo de ficción, "Houria", que significa "libertad" en árabe. "Volveré a rodar en Argelia", asegura y adelanta que será la historia de una joven bailarina que sufre una metamorfosis después de vivir una experiencia traumática.